sábado, 23 de enero de 2010

La propuesta para la Nueva Ley Extremeña de Educación me parece escasa y poco comprometida.

Recientemente hemos recibido en los centros en formato impreso las conclusiones que la Junta de Extremadura ha extraído de las múltiples propuestas que se han realizado durante los meses anteriores para la Nueva Ley Extremeña de Educación. Como ya nos tienen acostumbrados, vuelven a presentar la información educativa en un libro de gran calidad de papel y color que sinceramente creo innecesaria teniendo en cuenta que pocos se animan a leerlos y acaban apilados en alguna caja a merced del olvido.

Lo cierto es que he seguido con gran interés el proyecto para la creación de la Ley ya que, a pesar de que no demasiada gente le ha prestado la importancia que tiene, está en juego la concreción de las pautas que determinarán de aquí en más todos nuestros procedimientos educativos.

Teniendo en cuenta que afecta a todos los miembros que forman las distintas partes del sistema educativo, no veo, lamentablemente a los alumnos y padres lo suficientemente implicados e interesados por ver las distintas resoluciones a las que se ha llegado con esta propuesta.

Si bien es cierto que aún sólo es una propuesta, es el paso anterior a la confirmación de una Ley que regirá cada una de las actuaciones que formarán parte de nuestro día a día dentro del sector de la Educación: planes y programas, evaluación, desarrollo de competencias, implicación y compromiso de las familias...

Una vez que he analizado detenidamente la propuesta, no he visto grandes cambios con respecto a los criterios organizativos de nuestro sistema actual. La información parece escasa y me da la impresión de que no se quieren pillar demasiado los dedos. Propuestas como mejorar la situación de carencia de autoridad del docente o fortalecer la relación de las familias con el centro ocupan poco más que cuatro líneas dejando ciertamente muchas dudas en el aire.

Comprendo que se trata de una recopilación de todas las propuestas dirigidas por los distintos sectores de nuestra sociedad y que se ha tratado de sintetizar todas ellas direccionándolas dentro de los objetivos del Ministerio de Educación, pero sigo pensando que la información es escasa y poco comprometida.

Asimismo, sigo sin estar de acuerdo con algunas propuestas como potenciar la autonomía pedagógica, organizativa y de gestión de los centros educativos, ya que considero que esto puede llevar a la ruptura de determinados objetivos comunes o a la disconformidad de algunos docentes al comprobar que el funcionamiento de algunos centros es demasiado "cerrado" llegando a cierto "caciquismo" mientras que en otros pueden desarrollar sus labores pedagógicas de una forma más abierta y libre.

En cuanto a los planes de refuerzo no se concreta con exactitud qué pautas se van a llevar a cabo. Creo que sería preciso por ejemplo contemplar que en todos los centros se encarguen de que los alumnos que se incorporan y desconocen totalmente nuestro idioma tengan un periodo de aprendizaje fuera del aula para que, tras el contacto con la lengua, pueda incluirse en el grupo y familiarizarse con compañeros, profesores y las propias asignaturas. Y lo que quiero decir, es que se haga en TODOS los centros.

Por otro lado, se cita la necesidad de conseguir que el gran porcentaje actual de abandono escolar antes de los 16 años descienda, que el aprendizaje de las competencias básicas se desarrolle en todas las disciplinas y que nos esforcemos en la formación en valores como el respeto, la tolerancia, la solidaridad... Pero no nos dice CÓMO. De nuevo, tendrá que recaer en la propia experiencia o inexperiencia del docente determinar los métodos precisos para conseguir dichos objetivos.

De vital importancia es hacer referencia a la resolución de conflictos y la lucha por la convivencia escolar. Este es el eterno debate. El mundo occidental atraviesa actualmente una situación indignante de falta de respeto hacia el docente y de carencia absoluta de autoridad. Se ha confirmado en los últimos estudios científicos que para el año 2020 se prevé un desesperanzador aumento de depresiones, divorcios, crímenes y de suicidios en adolescentes. Los jóvenes de hoy tienen a su alcance todo aquello que desean y lo consiguen sin apenas esfuerzo (o ninguno). Esta actitud vaga se reflejará posteriormente en que los alumnos no sabrán decidir sobre las distintas opciones que se le plantearán en la vida dando lugar a una sociedad de adultos sin vocación y sin una formación cualificada. Sostener a una población poco profesional y fuera del alcance de las necesidades tecnológicas y humanísticas que demandarán los distintos países podría dar lugar a la mayor crisis de sostenibilidad social de la convivencia de los últimos siglos.

Garantizar, promover, potenciar, crear, favorecer... son verbos que tienen una gran fortaleza y llenan de ilusión. Hay que tener especial delicadeza cuando hablamos de personas. No se trata de repetir lo que ya se incluía en el currículo extremeño. Se trata de resolver y mejorar la situación que atravesamos. Determinar pautas y métodos adaptados a la realidad educativa en la que nos encontramos. Concretar, sinceramente entre todos, los objetivos que se pretenden con la seguridad del cumplimiento de todos los centros educativos. Asegurar una formación real y funcional de los docentes para enfrentar la vida laboral. Y hacer visibles los problemas auténticos entre los que nadamos:

- Docentes con poca protección y desautorizados.
- Alumnos conflictivos, absentistas y violentos.
- Débil actuación de Asuntos Sociales y de las familias.
- Escasa formación de los docentes y poca preparación para las situaciones reales de su trabajo.
- Escasa implicación de familiares en el ritmo de aprendizaje (de contenidos y valores) de sus hijos.
- Necesidad de unificar objetivos comunes entre los centros educativos.
- Mantenimiento de los materiales tecnológicos. Necesidad de concretar entre los centros educativos el modo de sanción ante los destrozos.
- Necesidad de devolver al profesorado a una situación laboral digna, segura y satisfactoria lejos de la sensación de desencanto en la que se encuentra.
- Pobre compromiso de algunos docentes para su autoformación y sentimiento de conformismo.

Para los que queráis leer el Documento de propuestas para la L.E.EX os dejo el siguiente enlace:

http://www.sindicatopide.org/L.E.EX/pdf/LEEX.pdf

3 comentarios:

Pantagruel dijo...

Juer, Xhandra, se nota que tenías presión verbal acumulada, Mañana te leo.

xhandra dijo...

Jajaja... sí, verdad?

Gabrielane dijo...

bueno ojala se le diera mas prioridad a la educacion, quizas las cosas cambiarian bastante. casas en venta